Cristina Kirchner, con domiciliaria y tobillera electrónica: los detalles de la resolución de los jueces
La prisión domiciliaria y el uso de la tobillera electrónica son dos de los detalles salientes de la condena que el Tribunal Oral 2 dispuso hoy contra la ex presidenta Cristina Kirchner en la causa Vialidad.

Según la resolución, Fernández de Kirchner tendrá que “permanecer en el domicilio fijado” de la calle San José 1111 del barrio porteño de Constitución, una “obligación que no podrá quebrantar salvo en situaciones excepcionales de fuerza mayor que deberá justificar debidamente”, por lo que “cualquier movimiento requerirá la autorización previa del tribunal, sin excepciones”.
A su vez, deberá “abstenerse de adoptar comportamientos que puedan perturbar la tranquilidad del vecindario y/o alterar la convivencia pacífica de sus habitantes”.
En un plazo de 48 horas, es decir, tiene que “presentar una nómina de las personas que integran su grupo familiar, custodia policial, profesionales médicos que la tratan asiduamente y abogados que la representan”.
También puede incluir quienes “podrán acceder al domicilio donde cumplirá la pena de prisión sin necesidad de autorización judicial, debiendo requerirse y motivarse el eventual acceso de toda otra persona no incluida en ese listado”.
Uno de los puntos sobresalientes y de mayor impacto es la orden que dio el cuerpo magistrado, que encabeza el juez Jorge Gorini, a la Dirección de Asistencia a Personas Bajo Vigilancia Electrónica para la colocación de un dispositivo de vigilancia electrónico.
Los jueces le encomendaron a la Dirección de Control y Asistencia de Ejecución Penal que lleve adelante la supervisión de la ejecución de la prisión domiciliaria y los resultados de la supervisión cada tres meses, período de tiempo al cabo del cual “se evaluará el grado de acatamiento de las reglas impuestas”.